ELISABETTA DONINI
Abstract:
Hacia el final de los años ’70 del siglo XX en diversos escritos tanto de historiadoras como de estudiosas interesadas en las formas del conocimiento y en especial modo de la ciencia, apareció en los Estados Unidos el término «gender» con el fin de distinguir la construcción histórica y social de las identidades obligadas para las mujeres y para los hombres de las diferencias biológicas relacionadas con los sexos.
El ámbito en que se centrará buena parte de mis reflexiones es el de la crítica feminista de la ciencia y de las perspectivas epistemológicas que esta crítica originó.
Donna Haraway, en la segunda mitad de los años 80 introdujo nuevos temas en el debate feminista, que tocan la misma esencia de un modo de conocimiento marcado por la perspectiva de género, lo que anteriormente he definido un cambio epistemológico fundamental. Por un lado, reflexionando sobre los conocimientos situados, planteó que la pluralidad de puntos de vista, y de las teorías feministas, no se pueden resolver pretendiendo que haya una única mirada de género. Por otro lado, el » Manifiesto cyborg » y muchos otros escritos, ayudó a desmantelar la noción de un «nosotros» unificado por el género y ha esbozado unas identidades más fragmentados y «post-género «, que incluyen también la mezcla biotecnológica entre los organismos animales y las máquinas.
A lo largo de diferentes caminos, desde el principio de los años 90 el surgir de la subjetividad lgtb y de las teorías queer ha agudizado la crisis de la perspectiva de género. A pesar de ello en 2013 Joan Scott, – convencida de que las categorías no pueden encasillarse en códigos porque las palabras y las ideas tienen una historia – quiso afirmar que «género sigue siendo un concepto útil de análisis crítico», a pesar de que pierda su fuerza desestabilizadora.
Biografía:
Ex profesora de Física en la Universidad de Turín, sigue siendo parte del Centro Interdisciplinario de Investigación y Estudios de la Mujer ( CIRSDe ) de la misma Universidad.
Después de un período dedicado a la investigación en física teórica, en 1970 se trasladó a la crítica histórica de la ciencia. Dando mayor atención a las diferencias de género, diez años más tarde.
Actualmente, participa en diversas actividades del movimiento de mujeres.
Ha publicado numerosos artículos, entre ellos La nube y el límite. Mujeres, ciencia, recorridos en el tiempo, Torino, Rosenberg & Sellier 1990 y Conversaciones con Evelyn Fox Keller, una científica anormal, Milán, Eleuthera 1991.